Yewa: Orisha de la pureza y castidad en la Santería

Yewa

Yewá es una Orisha (deidad) profundamente adorada tanto en África como en la Santería o tradiciones afrocaribeñas. Representa la soledad, el control y la represión de los sentimientos, siendo un emblema de la castidad femenina. Su dominio se extiende a los terrenos sagrados del cementerio, y su esencia se deposita en los féretros dentro de los sepulcros.

Su culto, que tiene sus raíces en el río Yewá en África, ha sido objeto de debate en cuanto a su origen. Aunque inicialmente fue venerada por los Mahi (grupo étnico de la región de Dahomey), los yorubas la asimilaron, reconociéndola por su pureza y belleza. En la tradición afrocubana, se le asocia con la franja blanca del arco iris, y es celosamente protegida como un símbolo de virginidad y pureza.


¿Quién es Yewá?

Yewá, cuyo nombre en el vocabulario Yorùbá se traduce como «nuestra madre» (Yeyé = madre / Awá = nuestra), es una Orisha originaria de la tierra Dahomey, aunque también se estima que vivió en Egwadó, Nigeria. Se le considera una Orisha fluvial, siendo la Diosa del río que lleva su nombre, el cual fluye paralelo al litoral en Nigeria y desemboca en la laguna de Lagos.

Yewa Santería

En Cuba, especialmente en Santiago, se le rinde una gran adoración. Su conexión con la muerte es profunda, guiando a los espíritus recién fallecidos hasta la presencia de la Orisha Oyá dentro del cementerio. Además de su papel fúnebre, Yewá es conocida por sus habilidades en navegación y pesca, y tiene una profunda afinidad por los jardines y las plumas de aura tiñosa (zamuro). Se dice que es una representante de la castidad, aunque tuvo un hijo que se le secó en el vientre, y desde ese momento, no volvió a estar con ningún hombre.

Origen y Evolución de Yewá en Diferentes Culturas

Yewá, es una deidad profundamente venerada, tiene sus raíces en África, específicamente en las tierras del Dahomey. Sin embargo, su origen ha sido objeto de debate y controversia. En África, se cree que vivió a orillas del río que lleva su nombre, pero con el tiempo, su culto se fue adaptando y evolucionando, siendo influenciado por diversas culturas y pueblos.

Su influencia y veneración se han extendido desde África hasta Cuba, adaptándose a diversas tradiciones y culturas a lo largo del camino. A pesar de las variaciones en su culto, lo que permanece constante es su profunda conexión con la muerte y el más allá. En la tradición afrocubana, se le asocia con la franja blanca del arco iris y se le considera un símbolo de virginidad y pureza.

«En África, el río Yewá es donde habita la diosa, pero su origen genera controversia… Es desde África, donde esta Orisha es confusa. En Cuba, parece haber tomado características de los diferentes cultos regionales que la adoraban, sin que esto parezca entorpecer su culto, que cada día es más limitado.»

Iyewá: Un Misterio, Arará Un Misterio Yoruba, Un Misterio Cubano – Águila de Ifa
Rio Yewa (Ewa) | África Occidental entre Nigeria y la República de Benín

¿Cómo es Yewá?

Yewá es una mujer de belleza inigualable, tan atractiva que incluso Shango se obsesionó con conquistarla. En su culto, se espera que sus iniciados mantengan la compostura; no deben desnudarse, hablar de temas sentimentales o mostrar afecto en su presencia. Además, no se permite la agresión en su presencia. Estas restricciones reflejan la delicadeza y el respeto que se le debe a esta Orisha.

Yewa Orisha

Se dice que en ocasiones se viste con indumentarias masculinas y visita a Olokun, disfrutando de los arrecifes y envolviéndose en lino de mar. Aunque tiene un carácter fuerte, también es apacible y dulce, y su naturaleza severa es comparable a la de Oduduwa. Una historia cuenta cómo fue seducida por Shango, quien se disfrazó de jardinero para entrar en su castillo y atraer su atención. Tras este evento, avergonzada, Yewá pidió ser enviada a un lugar donde ningún hombre pudiera verla, y desde entonces reside en el cementerio.


Características de Yewá

Yewá religión Yoruba

Yewá es una deidad muy compleja que ha sido objeto de muchas historias y leyendas a lo largo de los años. Su culto, aunque no tan extendido como el de otros Orishas yoruba, sigue siendo fundamental para muchos practicantes de la Santería. A continuación, se detallan algunas de las características más distintivas de esta Orisha:

Numero de Yewa

El número de Yewa es el 11 y sus múltiplos. Su día o celebración alegórica heredada del sincretismo suele conmemorarse el 30 de octubre.
A través del diloggún, esta Orisha se manifiesta mediante los Odun: osa (9) iroso (4) y ocana (1).

Sopera o receptáculo

Su receptáculo o sopera es una cesta elaborada en material de mimbre que se cubre con telas de color rojo y rosa. En su interior se coloca una casita donde se asienta el fundamento de la Orisha. Se ubica en lo alto del canastillero o en una habitación especial para ella.

Herramientas de Yewa

Herramientas de Yewa

Entre sus herramientas o atributos lleva: 9 piedras de color rosa, 9 escudos en forma de triángulos, 9 ángeles, 1 mano de caracoles (cauries), hueso de Egún, una campana con una más pequeña en su interior elaboradas en metal blanco o plateado, una muñeca, una tinaja pequeña, conchas de nácar, cauries, 22 esqueletos de metal, y un hueso de lechuza.

Traje

El traje de Yewa está confeccionado con telas de color rosa. Consiste en un vestido que posee una saya ancha atada en la cintura y una corona adornada con muchos caracoles.

Colores de Yewa

Su color por naturaleza es el rosa, también se le atribuye el color rojo, por tanto, sus elekes o collares son elaborados con cuentas de esos colores.


Los hijos de Yewá

Los hijos de Yewá, al igual que la Orisha, son conocidos por su naturaleza pura y misteriosa. Se dice que Yewa favorece especialmente a las jóvenes y vírgenes, reflejando su propia esencia casta y pura. Sin embargo, es importante destacar que la «virginidad de Yewá» no está ligada estrictamente al concepto sexual, sino más bien a una idea de pureza y protección de la energía femenina.

¿Cómo son los hijos de Yewá?

Está claro que Yewá es una Orisha representante de la castidad, por lo tanto, no acepta en sus hijos promiscuidad ni desorden a nivel de sus relaciones íntimas. Yewá, como Orisha, es una madre muy severa; no le agrada que sus hijos sean indecisos, desorganizados, inmorales ni erráticos. Otro tabú para sus hijos es que no deben comer ningún alimento proveniente del agua (mar o rio).

Se dice que sus hijos poseen una personalidad con carácter usualmente fuerte, pueden llegar a ser dominantes y demandantes. Acostumbran a ser muy moralistas y muy poco dados a las relaciones sentimentales, y de tenerlas suelen ser muy largas y estables. Normalmente, gozan de una intensa fuerza espiritual por lo que llegan a ser reconocidos como importantes videntes.

A menudo, se cree que las hijas de Yewá deben ser jóvenes y vírgenes para ser iniciadas en su culto. Sin embargo, esta creencia ha sido objeto de debate y controversia. Algunos sostienen que, si las hijas de Yewá se casan o pierden su virginidad, pasan a estar bajo el dominio de Oshun. Pero si en algún momento deciden abstenerse del acto sexual o quedan viudas, Yewá puede volver a regirlas, incluso llegando a poseerlas espiritualmente.

Mito Yewa Virgens – Obarainan Oloje

Es raro que Yewá elija hombres como sus hijos directos, aunque pueden servir en otros roles dentro de su culto.


¿Cómo se consagra o se recibe Yewa en la santería?

Para comenzar es necesario aclarar que para participar o realizar cualquier ceremonial con esta Orisha es necesario no haber tenido contacto sexual por lo menos 48 horas antes. Tampoco se puede estar con el cuerpo desnudo o semidesnudo en su presencia. Los hijos de Yewa son consagrados en Kariosha coronando Oshun con oro a Yewá.

Sin embargo, ese asentamiento es motivo de gran discusión, ya que, se estima que originalmente se asentaba directamente, pero en la actualidad no se tiene el conocimiento exacto de su ceremonial. Por otro lado, existen algunas casas religiosas que alegan que conocen los secretos para su consagración. De cualquier manera, lo más recomendable para la consagración de sus hijos es tener la plena seguridad que el iworo (santero) con el que van a consagrarse posea el conocimiento apropiado para oficiar tal ceremonial.

Los iworos en general también pueden recibir el fundamento de esta Orisha, y están sujetos a la misma recomendación realizada a sus hijos: «recibir el fundamento de Yewa conlleva una gran responsabilidad y madurez, por cuanto, sus iniciados deben ser practicantes de un estilo de vida basado en la moral, las buenas costumbres y la organización sentimental».

En Bahía, Brasil, Yewá es venerada solo en tres casas antiguas debido a la complejidad de su ritual. La última vez que se tiene noticias de un asentamiento directo de Yewá en Cuba fue hace mucho tiempo.

¿Qué se le pide a la Orisha Yewa?

Está es una Orisha muy delicada. Se le deben hacer peticiones que no transgredan la moral y buenas costumbres, más bien, que se mantengan dentro de sus prácticas. Se le ruega tener una vida apacible y calmada sobre todo cuando se ha llegado a la madurez, y a la vejez.  


Historias (Pataki), Mitos y leyendas de Yewá

Iyewá

Estas son algunas de las historias (patakies) más importantes de Yewa en la mitología yoruba, las cuales reflejan su importancia y lugar en la religión y las culturas afrocaribeñas.

El Refugio de Orunmila: La Alianza con Yewa

En esta historia, Awó Yagadá era el nombre de Orunmila en la tierra de Osha Lakueré Inle, que era tierra de Yewa, donde Orunmila siempre tenía grandes problemas con Ikú (la muerte), el cual era muy poderoso.

En una ocasión, Ikú fue con sus hijos en busca de Orunmila para matarlo, pero éste, que se había Koborí Eledá con Ejá-Tuto (rogación de cabeza con pargo), estaba dormido y durante el sueño, soñó que la muerte iba a buscarlo para terminar con él. Cuando despertó se hizo Osode, y el odu de la adivinación fue Edibere. Él se hizo Ebó y en esto llegó la rata que cantaba: «Okute bayi niwa ire, oba ofa omo inle, oba ifa adele nifa».

Donde el ratón acostumbraba a llevarse los Ikines (adelé) que Orunmila tenía preparados para sus consagraciones y los introducía en un túnel que él tenía debajo del piso de la casa.

Cuando Ikú llegó, Orunmila se escapó por el túnel que el ratón había hecho y salió pegado a la playa (Onika), donde desembocaba el río, que era tierra de Iya Orí Igí.

Allí se encontró con Yewá, que estaba lavando sus ropas. Orunmila la saludo, ella al verlo lo conoció y le contestó el saludo. El le contó que estaba sucediendo, Yewa le dijo: Escóndete debajo de la canasta. Ella lo cubrió con la canasta y con el paño que ella tenía encima, que era la ropa que ella usaba, que era de color rosado y adornado con muchos caracoles.

Cuando Ikú llegó ante Yewa, le preguntó por Orunmila. Ella lo invitó a comer Akara bibo, olelé y aguidi. Después le enseñó a Ikú hacia uno de los caminos o triíllos y le dijo: Por ahí se fue corriendo. Cuando Ikú tomó el camino que Yewa le señaló, le quitó el paño y la canasta y llevó a Orunmila para su casa. Allí ella le dijo: Lo único que yo como es chiva señorita (Aké), ganso y mucho aguidi, akara, olelé e ñame. Orunmila le dijo: Yo comeré todo menos ganso. Entonces comió con Yewa.

El Ita de la Orisha Yewa se hace a través de Ifa (Orunmila).

Después, que él le dio las gracias por haberlo salvado de Ikú y por haberle dado comida, Yewa le dijo: Yo solo tengo este cuarto, así es que usted dormirá en la puerta.

Por la noche, Orunmila, sintiendo una conexión especial con Yewa y notando la soledad que ella había experimentado durante mucho tiempo, logro seducirla (Ofikale).

Cuando pasaron varios días y que Ikú había perdido la pista de Orunmila y como estaba lleno con la comida que Yewa le había dado, no lo persiguió con tanto afán, por lo que Orula pudo regresar a su casa en la tierra Osha akuere, empleando el mismo túnel secreto por el cual había escapado. Al no estar perseguido por Ikú, le daba las gracias a ella y todos los días cantaba: «Osiba Yewa lodo, beni Yewa ile, awoni moyoye iku, Yewa inwa obasi dajon omonifa».

Pasado cierto tiempo, Yewa estaba embarazada (Oboñú) de Orunmila, y cuando tuvo la certeza de esta situación, se encaminó a la tierra Osha Lakuere en busca de Awó Yagadá.

Cuando llegó a casa de Orunmila, y enterado éste del problema, le hizo Osode y le vio Edibere y le dijo: -Tú vas a parir un hijo de Ifá, pero este hijo tuyo no puedes hacerle lo que le hiciste a los anteriores, que se los entregaste a Ikú.  Awó Agadá le dijo: Hay que prepararle Awofakan al feto (Omotitun), para que pueda nacer y llegar a ser grande en la tierra.

Entonces le dieron Awofakan (Mano de Orula) al feto en el vientre de Yewa, y sacó de Odu Toyale Otura Sa que era la tierra de Yewa. Donde Odi Ogbe y Otura Osa hicieron un pacto para siempre, salvar a todos los hijos de Edibere aunque fueran hijos de Shango, por medio de Yewá, y que siempre que en un Osode se le viera Odigbere a una mujer embarazada (Oboñú) se le diera Awofakan al feto, para que se salvara. Y desde entonces Odigbere se salva por Otura Sa, y Otura Sa se salva por Odigbere.

Y cuando le daban de comer a la Orisha cantaban: «Omo ni ifa baba adale nifa obara lalakuetun awo oni komomoye iñaga omo Yewa komomoye iku obara lalakuetun».

Donde Orunmila y Yewa comían de la chiva señorita (Aké) y ella juró que todo lo que ella hablara sería por boca de Orunmila.


El Desvanecimiento de Yewa en el Monte

Ocurrió que en la tierra Ababa Nogba Okonile ubicada entre el río y el mar, vivía tranquilamente Yewa. Ella acostumbraba a vestir de manera hermosa y exótica. Usaba vestidos de mirado, con encajes y tejidos con hilos y cintas de colores, en especial rojos.

Un día, ella quiso ir al monte a buscar los ingredientes para teñir sus ropajes, pero antes, fue a realizarse adivinación con Orunmila. Se le indicó los sacrificios que debía realizar para evitar que ella se fuese a perder en el monte, pudiendo regresar así, sana y salva a su casa. Yewa escuchó todos los consejos dados pero, no realizo los eboses recomendados.

Al día siguiente, salió al monte como tenía previsto. Estaba deseosa de encontrar sus alhajas y mariwó para hacer sus vestidos. Al andar entre la espesura del bosque se perdió. Desesperada tratando de encontrar la salida se internó más en el monte.

Sus hermanos asustados al ver que no regresaba salieron al monte a buscarla, pero les fue imposible. Rápidamente realizaron los sacrificios que había pendiente pero aun así, todo fue inútil. No lograron hacerla regresar, sólo regresó su espiritualidad.

Gracias a esta historia cuando se va a hacer o a montar el fundamento de Yewá, se debe ir al monte con una tinaja que debe ser preparada con: agua de río y agua de mar en ese lugar. Allí se realiza un ritual secreto con todos los elementos de la Orisha: la tinaja, pita de corojo, mariwó, una careta y los animales correspondientes.


Puedes leer: Todo sobre Babalú Ayé, el Orisha de las enfermedades y la sanación


Yewá en la Religión Católica (sincretismo)

Yewa en la religión católica

La Orisha Yewa es sincretizada en la religión católica con la virgen de Monserrat. Su comparación con el culto «Mariano» es totalmente lógica por ser la virgen María símbolo de castidad al igual que lo es Yewa para los Yorubas.

En el caso de la virgen de Monserrat, su imagen siempre es representada sosteniendo al niño Jesús, en actitudes totalmente naturales de una madre, pero adicionalmente a eso en la mano derecha suele llevar un ramo de plata. La flor como símbolo es muy común en el culto a Yewa y también es un ícono de la adoración a la Virgen.

Por otro lado, también puede ser sincretizada con Nuestra Señora de los Desamparados, con quien comparte una vez más la identificación con el culto Mariano. Además, coincide con el color de sus ropajes, ya que, ésta virgen en algunas de sus presentaciones es cubierta de flores de color rojo. Adicional a ello, ambas pueden ser reconocidas como defensoras de las buenas causas, protectoras de inocentes, mártires, sufridos, solitarios y desamparados.


Adimuses u ofrendas a Yewa

Adimuses u ofrendas a yewa

En la santería Yewa puede ser agasajada ofreciéndole: pescados con salsas y adornados con tomate, bolas de gofio con pescados, bolas de maní. Todo tipo de frutas y flores de color rosa.

¿Que come esta Orisha?

Los animales que se le inmolan deben ser jóvenes y vírgenes. Se le ofrece: chivo, gallinas blancas, palomas blancas, guinea blanca.

Hierbas de Yewa

  • Hinojo.
  • Tua tua.
  • Cipres.
  • Botón de oro.
  • Bleo blanco.
  • Algodón .
  • Prodigiosa.
  • También puede utilizar todas las hierbas correspondientes a Oya.

Oración de Yewa (Traducida)

Alabo y rezo al espíritu del Cementerio. Madre nuestra, madre Yewa.

Cúbreme con tu fuerza de los infames e inmorales enemigos.

Líbrame de las asechanzas de la muerte y las enfermedades.

Acompáñame con tu paz y tranquilidad.

Hazme digno de tu bendición y lléname de toda tu espiritualidad.

Dame claridad y clarividencia en el mundo espiritual del cual, solo tú conoces los secretos.

Te alabo hoy y siempre Diosa de las flores y rosas rojas.

Exaltada mujer coronada entre los jardines del mundo y del campo santo.

Madre mía, Madre nuestra, inmaculada madre.

Bendita y adorada Yewa, te alabo hoy, mañana y siempre.

Ashe. 

Rezo Secreto de Iyewa:

Yewá Ale Olu OlogboSuje Odu Kala Olula Agbo Dudu Ou Dogo Soni


Ritual con Yewa para el bienestar la salud:

Esto se hace cuando la persona enferma es de avanzada edad. Se le da a comer dos gallinas blancas a la Orisha y se reserva un poco de sangre en una jícara con vino tinto. Esto se usará para hacer un baño pidiendo por la salud de la persona.

Frases:

Yewa dice: «Mi omo, mientras más puras sean tus intenciones y correctas tus acciones, nunca te faltaran mis bendiciones».

Yewa dice: «Los falsos, traidores y oscuros de corazón tienen su puesto reservado en mi casa antes de lo previsto en su destino».


Puedes leer mas sobre los Orishas:

1 comentario en “Yewa”

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio